Festival único

El Festival BBK en Bilbao, celebrado en Kobetamendi, cautivó a los asistentes con su increíble ubicación rodeada de montañas y vistas panorámicas de la ciudad. Durante tres días llenos de música y emoción, el festival ofreció una amplia variedad de artistas destacados que dejaron su huella en el escenario.

El primer día, el grupo EEE GEE abrió el escenario principal, ofreciendo un set bien estructurado que encajaba perfectamente en ese horario. A continuación, Amaia brindó una actuación magistral, levantando al público y ofreciendo un espectáculo maravilloso. Uno de los momentos más destacados del festival ocurrió al atardecer mientras llovía suavemente, creando una atmósfera mágica al son de M83. Florence + The Machine cerró la noche con una fiesta inolvidable.

El segundo día comenzó con la Plazuela, un grupo que resultó ser un gran descubrimiento del festival. Morgan cautivó al público con su calidad musical, seguido por la sorpresa de Duki, quien ofreció un concierto de rap con una banda en vivo, convirtiendo su actuación en una de las más sorprendentes del día. María Escarmiento llenó el escenario más pequeño del festival con una energía arrolladora, demostrando su habilidad para animar a la multitud. Luego, Phoenix cumplió con las expectativas y The Blaze ofreció un momento destacado con sus melodías envolventes y una atmósfera única.

El tercer y último día, Menta, un grupo relativamente desconocido, subió al escenario y estuvo a la altura de las circunstancias. Sin embargo, Rojuu dejó una sensación de vacío debido a la falta de una banda completa en su presentación. La Paloma, por otro lado, ofreció un concierto digno del BBK en el escenario más pequeño, mientras que Cala Vento, mi grupo favorito del festival, sorprendió a todos con su increíble sonido a pesar de ser solo dos integrantes en el grupo. Love of Lesbian, que no decepciona nunca, brindó un concierto que algunos consideraron demasiado corto (aunque no estaban en el escenario principal).

Luego, Arctic Monkeys, uno de los momentos culminantes del festival, sorprendió con la energía de Alex Turner y un set list que comenzó con canciones de sus últimos dos discos y reservó los clásicos para el final. Finalmente, Arde Bogotá cerró el festival con su actuación impecable y su repertorio de canciones que nunca decepciona.

En cuanto a las instalaciones, las colas y los servicios, el festival, que atrae a 120.000 personas, presentó algunos desafíos logísticos. El sistema de baños cerrados generó grandes colas y aglomeraciones en puntos clave del festival. La oferta gastronómica fue considerada limitada en comparación con otros festivales de tamaño similar o incluso menor. Sin embargo, los accesos resultaron fáciles gracias al servicio gratuito de lanzaderas de autobuses que ofrecía el festival hacia la ciudad y el camping.

Hablando del camping, su ubicación en la cima de Kobetamendi ofrecía vistas espectaculares y se ofrecía a un precio asequible de 20€, que incluía lanzaderas y duchas (con agua fría). Dentro del camping, había un bar y tres food trucks, pero se notaba la falta de opciones veganas y variedad lo cual generaba colas largas. Los baños, a pesar de ser PoliCleans, se mantuvieron limpios gracias a un servicio de limpieza constante.

En resumen, el Festival BBK en Bilbao destacó por su ubicación impresionante, una mezcla diversa de artistas talentosos y momentos inolvidables. A pesar de algunos desafíos logísticos, los asistentes disfrutaron de una experiencia musical inigualable en un ambiente vibrante y emocionante.